Como hemos hablado en otras ocasiones, emprender es un
trabajo de hormiga, del día a día, no apto para todos y el cual tiene muchas características
particulares para que podamos lograr el éxito que estamos buscando.
Esta vez quiero hablarles sobre los “Demonios” del
emprendimiento, que para mí, son todos esos obstáculos que nos impiden tener éxito
en el camino que llevamos, los cuales los podemos agrupar en obstáculos mentales,
de forma, de lugar, de situación económica, y un sin número más de categorías.
El primer demonio que vamos a enfrentar es en nuestra mente,
cuando nos preguntemos ¿Valdrá la pena el esfuerzo y el tiempo invertido? Ese
es nuestro primer obstáculo, ya que seguramente tenemos un empleo fijo con un
sueldo seguro y estamos arriesgando a perder eso por un futuro incierto en
cualquier emprendimiento que vayamos a realizar. Sin duda alguna si nos estamos
haciendo esa pregunta, estamos empezando con el pie izquierdo nuestro camino
para emprender.
También tenemos que tener muy en claro que tenemos que ser
excelentes en lo que vayamos a realizar, no podemos conformarnos con ser parte
del promedio ya que sin duda alguna además del tema de la constancia, los que
triunfan son los que tienden a destacar, a ver cosas donde los demás no pueden
verlas, este es un demonio que debemos superar rápidamente, TENEMOS que ser
mejores que el promedio para poder ser exitosos como emprendedores.
Otro de los problemas o demonios que enfrentaremos es si poseemos
una carrera universitaria, muchos me dirán “estás loco”, ¿Por qué menciono
esto? Porque al estudiar o especializarnos en cierta área, nos encasillamos en
esa rama y nos preparamos para solamente hacer esa sola cosa en la vida. Nada más
alejado del emprendimiento que esto, para emprender debemos romper ese
paradigma de que somos Ingenieros en Informática y solo sabemos programar,
debemos expandir nuestra mente, explorar otras áreas, aprender de los mejores,
estudiar los casos de emprendimientos exitosos. Necesitamos romper los esquemas
para que nuestras ideas lleguen a todos y no nos quedemos solamente en lo que estudiamos.
Quizás para mi uno de los más grandes problemas y demonios
internos es nuestro miedo a fallar, pero ¿cómo podemos volvernos expertos en un
tema sino fallamos? Cada vez que fallamos adquirimos nuevos conocimientos, que
nos ayudaran a nuestro próximo emprendimiento y en cada ocasión que lo
repitamos llegaremos más lejos hasta tocar nuestro éxito.
Sin duda alguna el emprendimiento es apasionante, pero
debemos librarnos de todos los demonios que nos impiden hacerlo, debemos seguir
nuestra pasión, hacer lo que nos gusta, y estar en la constante búsqueda de ser
mejores que los demás para poder destacar y tener éxito. Y tú, ¿ya te libraste
de tus demonios?
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